martes, 31 de julio de 2018

Nunca se puede servir (o atender plenamente de verdad) a dos amos, o eliges a Dios o eliges al No-Dios, así es, o eliges a la Verdad o eliges a la No-Verdad (o a la mentira de mil maneras disfrazada o excusada).  Eso está claro. Pero a lo que más se es SERVIL a costa de la verdad es a una retórica;  sí, muchos desalmados son tan serviles a una o a otra retórica-interpretación (a un bla-bla agradable-rentable socialmente pero que sacrifica a la verdad o que patea a la razón) siendo SEGUIDORES de ella, colaborando en un sobreproteccionismo social a favor de ella, y tanto la idealizan (a lo huir de las responsabilidades de la realidad) como corruptamente le esconden sus males, sombras o defectos. 
Tú no puedes servir a la razón (lo único que demuestra imparcialmente el bien o la realidad), a la ética o a ser responsable con la realidad  a un mismo tiempo que sirves a lo contrario:   el palabreo, la retórica, el buenismo o el seguimiento desalmado-aborregado-alineado de dar las espaldas a ése que decente e irrebatiblemente demuestra u objetiviza luz-razón (sí, porque la razón en sociedad es manifiestamente objetiva solo cuando alguien la hace manifiestamente objetiva, nada más).
Exacto, la RAZÓN solo existe si es MOSTRADA por un SUJETO VOLITIVO QUE NO SE SOMETE A LA MENTIRA-SINRAZÓN, o que no se deja contaminar de los que, conformados (en ya anulación volitiva), se han formado "inconscientemente" (sin una mínima atención a la realidad-verdad) de todas las sinrazones.

Y eso se aplica también a los científicos.  Sí, tengo que decir de una vez (en mi deber ético responsable e ineludible, sí, en honor a la verdad, ¡SIN SERVIR a nada más!), que los científicos de ahora usan la ciencia, sí, pero no usan la razón, que son dos cosas que pueden ser infinitamente contrarias, porque:
La ciencia objetiva o irrebatiblemente sirve a una DEMANDA de la sociedad y, al tener ésa CONDICIONALIDAD de demanda, ya no puede ser razón (sí, puesto que la razón objetivamente no puede tener restricciones o condiciones hacia ella, por ser ella o que vengan desde fuera a ella). 
La ciencia no es una "capacidad de verdad" en sí misma como lo es la razón, sino es una alineación-consenso-cerrazón (sí, cerrazón-conveniencia porque mientras la razón no se esconde de lo que le puede decirle que no es razón, la ciencia lo hace o no tiene capacidades para no hacerlo). 
La ciencia se sirve absolutamente siempre de cualquier PODER o poderes (y no hay nada que garantice que no lo vaya a hacer en un solo instante); y ese procedimiento obvia u objetivamente de ninguna manera va a dar RESULTADOS DE SOLO RAZÓN, cuando los instrumentos de tal procedimiento han sido ajenos a solo razón. Ya en cambio, la razón se sirve solo de razón (nada más, no de influencias, no de corporativismos, no de imágenes-prestigios-idolatraciones, no de "altavoces sociales", etc).


Lo que sí hacen todos los científicos de ahora (lamentablemente, dándose vergüenza ética) es el utilizar la ciencia para sus "parecidos razonables", es decir, utilizan una serie de "consensos" (cocinados grupales o alinenados) para hacer colar unos "parecidos" a la razón. Y, para crear un convencimiento sublimado eso, utilizan "argumentos estrella", o sea, como el que me dijo uno: "la ciencia hace lo que funciona".  ¡Claro!, tú coges un coche y lo despiezas y ya lo puedes montar de miles de formas, sí, pero todas ellas perfectamente funcionables, con una energía u otra (aun tengas tú que empujarle)  y ya... eso es la verdad para ellos, ¡todo un manicomio!
José Repiso Moyano